domingo, 8 de febrero de 2009

ASOMA LA CABEZA DEL PERRO


En el rumor vacío de un ala
que rozó la dicha
y besó ausencia,
asoma la cabeza del perro, absorto
en el enojo entrecruzado de las miradas.

Noche de duelo.
Por esquinas de la sala
cuatro estrellas quebradas.

Ya velan los párpados
agotados veneros, antaño
sobre altas torres manando:
pulsos; círculos; abrazos;
espirales; regresos; parábolas…

Y las fanfarrias montan
a lomo de los ecos,
solo entrecortado el galopar
por ladridos crecidos
en los huertos umbrosos del patio,
entre la blanca angustia
alzada de los nardos.

1 comentario:

mj dijo...

Gracias por seguirme, es todo un detalle, si no te importa también te sigo y te seguiré leyendo.
Un saludo
mj