jueves, 16 de abril de 2009

REFUGIO DE TUS LABIOS


Si las camelias ensartadas en lánguido cuerpo,
jarra de plata latente, pudieran trocar en grito
su delicada belleza.

Si la luna hundida en puerto lejano,
tan solo humo azul en el recuerdo, siguiera
mis pasos de ahora con su reflejo.

Si la mano cerrada.
Si la torre caída.
Si el aire inquieto.
Si la sombra tras la esquina.
Si la persiana echada.

Si los fogones de la máquina
que necesita brazo y carbón
para mover el ritmo de las horas,
conocieran la fuente viva de tu capricho,
todo,
absolutamente todo,
buscaría el refugio azucarado de tus labios,
para brotar, nacimiento nuevo, como palabra
indefinida en el tiempo y el dolor:
Puro juego de tu voz.

viernes, 3 de abril de 2009

ATLANTE DEL TIEMPO

Tenemos entre las manos,
frente a nuestros huesos,
vacías estancias caídas
desde un paraíso amargo.

Luz repentina que quiebra
la tristeza opaca de los olvidos:
reposa tus palabras necias
al borde del camino lacerado
con la voz sangrante de los muertos.

En el aire un espanto;
en la tierra mi canto callado;
las voces de los lirios llorando;
la entreabierta ventana deja pasar
un apergaminado rayo.

Y el Atlante del tiempo,
cínico y barbado, se inclina
para oler el aroma oscuro del olvido.